More than words

Por Yassira Huarcaya

Inició Tinkuy, y con él los reencuentros de inicio de año con alegría, entusiasmo, y algo de nostalgia. En nuestro mural algunas manos están ausentes, pero las presentes son de quienes decidieron seguir con esta aventura. Una ceremonia siempre es el rito ideal para iniciar la nueva aventura del año. La organizamos para que fuera fluida y bonita, que tome su debido tiempo, cuidando que no sea demasiado para no sancocharse bajo el sol. Una ceremonia que sea, sobre todo, llena de significado.

Para nuestra ceremonia de este año, Inés tuvo la idea de que se relacione con la Celebration of Heroes de fin de año. Aquella donde les entregamos una piedra con una palabra escrita que simboliza ese rasgo de carácter en el que los hemos visto trabajar a lo largo de todo ese año. ¿Cómo lo haríamos? Cada Puma elegiría la palabra que simboliza lo que quiere fortalecer este año, y lo pondría en una cápsula del tiempo. Luego, en diciembre, sacaremos esa palabra para conocer si se cumplió lo que planearon y entonces los Pumas, con el feedback de sus compañeres, elegirán su palabra final del año sea esa, u otra que no esperaban. 

Dudé al inicio frente a la idea de pedirles a los Pumas Spark una palabra que definiera todo aquello para lo que debían trabajar o, como les decimos nosotras: “aquello que te cuesta o para lo que no estás liste”.  Colocar eso en una sola palabra me sonaba super abstracto y sentía que saldrían más que nada frases antes que una palabra.

Llegó el día, y les contamos a los Pumas la dinámica, se emocionaron e intrigaron por la cápsula del tiempo “¿una cápsula? ¿qué es eso? ¿pero dónde estará?”. Luego de esas preguntas los invitamos a pensar en la palabra. Trajimos como ejemplo la Celebration of Heroes y recordamos juntes las palabras que recibieron el año pasado. Luego en parejas fueron invitados a trabajar en sus palabras y los Pumas más pequeños se juntaron con las guías. 

Al acompañar a los Pumas más pequeños salió lo que esperábamos, resumir en una palabra no sería sencillo. Preguntamos “¿Qué quieres lograr este año?”. El Puma que Rosi acompañaba le respondió que quería ser Elsa. Rosi preguntó qué cualidad de Elsa le gustaba más y eso bastó para que la palabra se convirtiera en VALENTÍA. El Puma que yo acompañaba me respondió “dejar el pañal en diciembre” y “tomar leche solo los lunes”. He de admitir que no supe cómo formular pregunta alguna para convertirlo en una palabra, yo tenía muchas palabras rondando en mi cabeza: valentía, autonomía, y crecer, pero esa no era la idea, yo no debía ser la protagonista. Volvimos al círculo con todos los Pumas y les dije: “este Puma desea lograr dejar el pañal para diciembre y tomar leche en Tinkuy únicamente los lunes”, que palabra creen que representa estas metas, ESFUERZO se escuchó al unísono. Le consulté al Puma si estaba de acuerdo y dijo que sí.

Dos Pumas quienes habían trabajado juntes habían escrito “ELADO”, en eso se querían convertir o lograr, querían ser helados. Pues nada más divertido que ello, además de estar frescos siempre. Les invitamos a repensar en aquello que les costaba como héroes y deseaban lograr. Uno de ellos dijo que le costaba hacer gemas y ganar badges, el resto al escuchar dijo “ah eso es enfocarse”. Y así ENFOCARSE fue la palabra escogida. 

La otra heroína que también había decidido por “ELADO” no lograba todavía pensar en una palabra. “Yass, me cuesta pensar”, dijo. Le pregunté si sentía muchas ideas en la cabeza o no se le ocurría ninguna, y mre respondió: “solo me cuesta pensar”. Un Puma levantó su mano y le sugirió poner la palabra DECIR QUE NO, le contó cómo había notado que en muchas ocasiones durante el juego a ella le costaba poner límites incluso si este se tornaba brusco y ella no estaba de acuerdo. La joven heroína escuchó con calma pero respondió “que ella no consideraba que fuera algo en lo que debía trabajar”. Respetamos su decisión y finalmente se decidió por ENFOCARSE.

Para cerrar, la última heroína dijo que no se le ocurría nada. Le invitamos a contarle a los Pumas qué era lo que le costaba más. Asumió que era enfocarse y ganar gemas, le dijeron que ENFOCARSE. Ella respondió que no, que enfocarse no le cuesta solo que le da flojera. “Ah, ESFUERZO entonces”, añadió un Puma. “Sí, eso debe ser”, agregó la niña. Con todas las palabras en marcha los Pumas fueron entusiasmados a la ceremonia, conversaron con sus familias a quienes observamos intrigadas por las palabras pero a la vez asombradas y enternecidas.

Para cerrar este post, quisiera contarles el porqué del título. Horas previas a la ceremonia reproduje algunas canciones en mi teléfono pues deseaba encontrar la canción ideal para el momento en el que tanto familias como Pumas compartieran sus palabras entre elles. Reproduje en instrumental algunas canciones pero ninguna me convencía. Hasta que reproduje More than words de Extreme, no estaba segura de mi elección, cuando de pronto volteo y a mi izquierda tenía varios Pumas Spark moviendo la cabeza al ritmo de la música. Los miré con una sonrisa en el rostro y soltaron un “‘¡qué buena música, Yass!”. No la pensé más, era la elegida. Me causó gracia la coincidencia del nombre de la canción con lo que pasaba en la ceremonia y pensé: “Bueno lo que va escrito en esos pequeños papeles sin duda es more than words”.